19 Ene UN NUEVO MODO DE CELEBRAR LA NAVIDAD/ESPAÑA
La pandemia que estamos viviendo nos ha situado ante los acontecimientos de la vida de una nueva forma y por supuesto también ante la Navidad.
En Atalaya, como en todas partes, sufrimos la misma situación, pero a la vez percibimos que lo importante permanece por encima de la dificultad, del confinamiento y la restricción. Hemos tenido que acogernos a las medidas sanitarias reglamentarias, lo hemos hecho con responsabilidad y prudencia.
No hemos podido celebrar ningún encuentro navideño, como estábamos acostumbrados, pero tanto en el apoyo escolar como en el comedor hemos sido contagiados por la solidaridad, la acogida y la ayuda desinteresada de entidades, instituciones y voluntarios.
Con ellos y gracias a ellos, hemos podido celebrar la alegría y la sorpresa con regalos a lo más de 100 niños del apoyo escolar, y lo que es más importante, han tenido la oportunidad de sorprenderse, de ilusionarse. Su sonrisa, su nerviosismo ante el paquete regalo es una muestra de lo fácil que es contagiar y contagiarse de la alegría.
Los más de 50 usuarios del comedor han disfrutado de buenos menús, regalos y buena compañía, fruto del buen hacer de muchos voluntarios, de la generosidad de otras fundaciones e instituciones, pero de manera especial ha sido una nueva oportunidad para palpar que todos somos hermanos, que las personas estamos por delante de las fronteras.
También hemos tenido un regalo estas Navidades, Atalaya ha sido galardonada con los Premios La 8 Burgos en la categoría de “Valores Humanos” Un merecido reconocimiento al interés y al trabajo de mucha gente, que lucha por los derechos y por la dignidad de muchas personas.
Una vez más podemos confirmar que la Navidad se reconoce: en lo sencillo, en lo frágil, en lo pequeño, en el agradecido, en el que se asombra de lo bueno que hay en la vida y ahí, justo ahí es donde Dios ha decidido quedarse con nosotros.
Elvira Santamaria, aci