10 Mar Algunos días en Calais
Desde St Ouen l’Aumône, Francia, quisiéramos compartir una experiencia que hemos hecho como comunidad: del 22 al 27 de enero 2025, hemos estado en Calais.
¿Dónde está Calais?
En el norte de Francia, es el punto más cercano de Inglaterra y una zona donde muchos migrantes intentan cruzar ilegalmente la Mancha para llegar al Reino Unido.
¿Por qué fuimos a Calais?
El objetivo era doble: por una parte, hacer una experiencia comunitaria de servicio a los migrantes ; pero también seguir buscando posibilidades de organizar una experiencia pastoral con jóvenes en el verano de 2025.
¿Dónde nos quedamos alojadas (y dónde podrían quedarse los jóvenes)?
Como en el verano, fuimos acogidas por la comunidad de los Misioneros Scalabrinianos, que llevan la parroquia de Calais. Nos quedamos en el centro parroquial, un espacio amplio, con una cocina y dos salas de reuniones, una capilla, baños y una ducha. Tiene también un gran patio exterior, aunque ya hemos podido experimentar que en Calais puede hacer frío todo el año…
Compartiendo vida y misión…
Los tres curas Scalabrinianos, dos de Haití y uno de Vietnam, nos acogieron muy bien y están encantados de que podamos hacer allí una experiencia con jóvenes. Aunque tienen por carisma la migración, la vida parroquial no les deja mucho tiempo para ocuparse directamente de los migrantes, pero llevan una asociación que gestiona una casa de acogida temporaria para hombres y sostienen las actividades las distintas actividades de la parroquia (sobre todo con los sin techo). La parroquia tiene también una vida espiritual muy intensa, con adoración todas las mañanas a las 7h, dos misas diarias, etc…
También las hermanas “Auxiliatrices”, una congregación de espiritualidad ignaciana, que tienen en Calais una experiencia desde hace 8 años. Françoise y Anne-Laurence, francesas, y Maria Vittoria, italiana, nos han compartido su misión en el Secours Catholique (Caritas Francia) y en una pequeña casa de acogida para voluntarios. Están también contentas de que vayamos y dispuestas a ayudarnos en lo que puedan. ¡Tanta ayuda! ¡Tanto que agradecer!
Nuestro día a día en Calais…
Después de nuestra experiencia en el verano pasado, habíamos elegido DOS ASSOCIACIONES con las que colaborar directamente, como voluntarias. Aunque no teníamos mucho tiempo, hemos estado 2 días en cada una, lo que nos permitió al menos ver lo que se hace y lo que podríamos ofrecer a los jóvenes. Para nosotras, personalmente, fue también una alegría grande poder gustar internamente estos días de servicio, que permitieron hacer la vida un poquito más feliz (¡más “ligera”, al menos!) a los migrantes que están en Calais.
REFUGEE COMMUNITY KITCHEN: cocinar y distribuir comidas a los migrantes
«Somos voluntarios. Cortamos. Mezclamos. Servimos. Creemos que la comida es un derecho humano. Todo el mundo merece los alimentos que nos gustaría comer en nuestras propias mesas.» Es así como esta asociación inglesa, creada en 2015, se presenta en su sitio web.
Durante dos días, eso fue lo que hicimos: cortar verduras, pelar cebollas, preparar comidas… y lavar la vajilla, ¡mucha vajilla! Todo ello en un ambiente relajado, acogedor y muy alegre, entre voluntarios de todas las edades y con historias y orígenes muy diferentes… ¡Una gozada!
Una cosa nos unía:
El deseo de SERVIR, sin juicios ni condiciones, los migrantes que pasan el día en los campamentos. Este invierno, se preparan en media 800 comidas al día… Pero, en verano, !ya han llegado a las 3000! Por la tarde, algunos voluntarios salen a distribuir las comidas calientes a la gente.
Para saber más : https://refugeecommunitykitchen.org/
CARE 4 CALAIS: distribuir bienes de primera necesidad y ofrecer un “espacio de vida” a los migrantes
Los cerca de 900 refugiados que viven en este momento en Calais y alrededores duermen a la intemperie en las peores condiciones y la policía francesa, subvencionada por el gobierno inglés, les confisca regularmente sus sacos de dormir y sus pertenencias (pasan en media cada 48h en todos los campos, para impedir que los campamentos se vuelvan permanentes.
La Asociación “Care 4 Calais”, también inglesa, hace entregas regulares de los productos más necesarios, como ropa, calzado, sacos de dormir y artículos de aseo, de manera eficaz, muy bien organizada, y sobre todo, muy digna. Alrededor de la distribución, que dura 2h30 cada día – y se hace siempre, aunque llueva a cántaros, como nos pasó – se crea un verdadero “refugio de vida” para los migrantes: una peluquería ambulante, servicio de té y café calientes, juegos de mesa, un lugar para aprender inglés… y un campo de fútbol improvisado en medio del barrio. Todo con el objetivo de ofrecer un poco de dignidad a quienes esperan, fielmente, la llegada de las furgonetas.
Las distribuciones se hacen por la tarde, y cada mañana los voluntarios se reúnen en el almacén para limpiar cuidadosamente todo el material utilizado el día anterior, de modo que todo esté limpio y ordenado para los nuevos usuarios. ¡Una experiencia preciosa de la “cultura del cuidado” en la que estamos ahondando en nuestro Instituto!
Para saber más: https://care4calais.org/
Horizonte: ¿y ahora qué?
Después de esta experiencia, se confirma nuestro deseo de ofrecer, como Provincia, a los jóvenes de Europa – en colaboración con el grupo europeo de Movilidad Humana – la oportunidad de servir y de dejarse evangelizar por el contacto directo con los migrantes, en Calais.
Con la ayuda de los curas y de la comunidad de las Auxiliatrices, estamos ultimando los detalles para poder ofrecer una experiencia completa, de oración y de servicio, “a nuestro modo”. En breve os daremos más informaciones, pero podéis empezar a pensar en personas concretas (universitarios y jóvenes adultos) que os gustaría desafiar a integrar este proyecto (en julio) … Y, ¡ojalá podáis venir también! – en el verano o en otro momento – para sentir y gustar esta realidad… Y, por favor, ¡rezad por esta experiencia, para que sea DE DIOS!
La comunidad de St Ouen l’Aumône
© Jess Hurd
