30 Jun NO PIDO APLAUSO, PIDO RECONOCIMIENTO/ESPAÑA
Las empleadas de hogar internas también han estado en peligro de ser contagiadas por el coronavirus, porque en su mayoría atienden a personas mayores desgastadas y deterioradas por el peso de los años y en algunos casos con patologías graves. Las personas mayores: requieren infinito respeto, “cuidado, cercanía y mucho cariño.” En una palabra, contacto físico continúo.
Muchas cuidadoras han sufrido, porque en algunos casos ningún familiar se dignó a preguntarle cómo se encontraba la persona que atendía. También porque los tres meses de confinamiento le han producido tristeza, soledad, inseguridad e incertidumbre. Conozco personalmente a muchas de ellas y sé que las han cuidado como si se tratara de un familiar. “Bienaventurados los misericordiosos, porque ellos alcanzarán misericordia.”
Si me valiera de algo, grabaría algunas de las conversaciones de las que escucho cuando las atiendo, pero faltaría al secreto profesional, al respeto y a la dignidad de la persona, y además, sería un delito grave.
Me trago algunas que otras lágrimas al escuchar cosas que me parecen casi increíbles, como la “racanería” de algunas familias que les dejan a las empleadas el mínimo dinero para hacer la compra de diario, de tal manera, que muchas veces tienen que ponerlo de su sueldo porque no le alcanza, y luego no hay manera de recuperarlo. Hablo de empleadores con un nivel económico medio alto.
También me hablan del poco “calor humano” que reciben las personas que cuidan, por parte de sus familiares. Da la impresión que al tener una cuidadora o cuidador “ya está todo hecho.” Sé, con certeza, que más de uno y más de dos ancianos y ancianas, han fallecido en los brazos del cuidador o la cuidadora. Algunas lloran amargamente cuando el Señor se lleva a su “mamita, ” o viceversa como dicen ellas. De esto, sabe algo el Hospital y yo también. “Yo te alabo Padre… porque has revelado estas cosas a los sencillos…”
Muchas cuidadoras/es con Permiso de Residencia y Trabajo (NIE) se han quedado sin empleo, como otros muchos españoles y cuál ha sido su sorpresa que al solicitar la Vida Laboral se han encontrado que tenían sin cubrir algunos meses en la Seguridad Social, con lo cual, se quedan sin el derecho al Ingreso Mínimo Vital, aprobado por el Gobierno el 15 de junio de 2020, porque uno de los requisitos es haber estado de alta en la S. Social.
Observo con frecuencia que algunos de los empleadores que vienen a visitarme para solicitar una cuidador/a, buscan “delegar” toda la responsabilidad sobre ellos/as durante las 24 horas, porque ellos son incapaces de hacerlo o porque ya estorban. Con salarios denigrantes, sin Seguridad Social a veces y sin descanso, que en muchas ocasiones, no son retribuidos. Esto es una dura y triste realidad.
Dios y Padre de misericordia: “Que la solidaridad de tantas miles de personas durante el confinamiento, no se desvanezca”
Consuelo Díaz aci